jueves, 10 de julio de 2014

Cuidados de un bebé prematuro.

Un bebé es considerado prematuro cuando nace antes de las 37 semanas de embarazo.

Generalmente necesitan cuidados aún más especiales que un bebé nacido a término. Es probable que tengan que permanecer unos días en una incubadora y que su desarrollo requiera de un minucioso seguimiento.

Una vez que su sistema respiratorio y otras funciones vitales son suficientemente fuertes, continuarán sus cuidados en la unidad neonatal hasta que estén preparados para ir a casa.

Son varias las razones por las que un bebé puede nacer antes de tiempo, pero es importante saber que haber tenido un bebé prematuro no significa que en futuros embarazos vaya a ocurrir lo mismo. Para tu tranquilidad, 9 de cada 10 mamás cuyo primer bebé fue prematuro, llevan a término embarazos posteriores. Puedes conseguir información, consejo y apoyo adicional a través de tu matrona.


El vínculo con tu bebé prematuro

Incluso los bebés más prematuros son capaces de reconocer tu voz y tu olor. Si todavía no puedes coger al bebé en brazos, hablarle y permanecer cerca de él os ayudará a construir vuestra relación. Si te permiten acariciarle e incluso darle un suave masaje, esto puede ser una experiencia muy positiva y reconfortante para ambos.
Ten en cuenta que visitar a un bebé prematuro puede ser emocionante o incluso impactante. Es totalmente natural sentir impotencia e incluso ansiedad. Además es probable que el bebé permanezca varias semana en el hospital, así que si prefieres descansar hazlo sin ningún remordimiento.

El desarrollo de tu bebé prematuro
Los hitos habituales del desarrollo de un bebé no se dan de la misma forma en el caso de los prematuros. Deben afrontar muchos desafíos en sus primeras semanas o meses de vida.
Pero esto tampoco significa que su desarrollo tenga que ser tardío. Su progreso dependerá de la semana de embarazo en la que diste a luz y de otros muchos factores. Con amor y estímulo, tu bebé alcanzará los hitos en su desarrollo a su debido tiempo.


Alimentando a tu bebé prematuro
Extraer la leche materna es la mejor manera de alimentar a un bebé prematuro cubriendo así sus necesidades. Además, le proporcionará todos los beneficios que aporta la lactancia materna sobre el sistema inmunitario. Si tu suministro de leche varía mucho, puedes estimular la producción de leche abrazando o acariciando al bebé. También puedes extraerte la leche mientras permaneces cerca del bebé. Un baño caliente o un suave auto-masaje en la zona también puede ayudarte. Puedes probar diferentes sacaleches hasta encontrar cual se adapta mejor a ti.

Es completamente natural tener dudas cuando se tiene un bebé prematuro. Si tienes algo que te preocupa, porque no compartir esas preocupaciones con tu matrona o con un equipo de expertos.

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